Si ya tienes una tienda en línea o estás por lanzarla, es importante ofrecer a tus clientes un sistema de pago seguro, rápido y fácil de usar. Las solución que elijas debe complacer las necesidades de tus clientes, pero también la de tu empresa; por lo tanto, deberá protegerte contra el fraude, aceptar varios métodos de pago, ser cómoda de usar y compatible con tu plataforma.
Para aceptar pagos por internet y poder procesar tarjetas de crédito o débito, se necesita una pasarela de pago. La elección de la pasarela adecuada determina las divisas que puede aceptar, la tasa de transacción, la rapidez con la que el dinero llega a su cuenta comercial y los métodos de pago que ofrecerá.
Según Invespcro.com, más del 23% de los clientes abandonan sus carritos de la compra debido a un sistema de pago complejo (11%) o a que se requiere demasiada información para completarlo (12%). Estas estadísticas confirman que la elección del proveedor de soluciones de pago adecuado es tan importante como otros aspectos de un buen sitio web de comercio electrónico.
Pero, para elegir una solución de pago, primero hay que entender qué es una pasarela de pago y cómo funciona.
Una pasarela de pago es un servicio que autoriza y procesa los pagos en las tiendas online y en las tiendas físicas, sirve de portal para facilitar el flujo de transacciones entre clientes y comerciantes. Además, utiliza protocolos de seguridad y encriptación para transmitir los datos de la transacción de forma segura.
Es importante que sepas que las pasarelas de pago pueden ejecutar los siguientes tipos de transacciones:
Ahora que sabes qué es y cuáles son las transacciones que suceden en una pasarela, veamos qué tipos de pasarelas existen.
En general, existen estos métodos principales para integrar una pasarela de pago:
Una pasarela de pago alojada actúa como un tercero, ya que requiere que sus clientes salgan de su sitio web para completar una compra. Las ventajas de una pasarela de pago alojada son que todo el procesamiento de los pagos corre a cargo del proveedor de servicios. Los datos de las tarjetas de los clientes también son almacenados por el proveedor.
Por lo tanto, el uso de una pasarela alojada no requiere el cumplimiento de la normativa PCI y ofrece una integración bastante sencilla.
El problema es que la tienda en línea no tiene control sobre una pasarela alojada. Los clientes pueden no confiar en los sistemas de pago de terceros. Además, redirigirlos fuera de su sitio web reduce la tasa de conversión y tampoco ayuda a su marca.
Para integrarlo solo necesitas ir a los sitios web de proveedores. Un ejemplo de la integración de una pasarela alojada es PayPal Express Checkout. En ella, básicamente recibes un pedazo de código JavaScript el cual coloca un botón en tu sitio web. Al hacer clic en el botón se activará la API REST de PayPal y el flujo de pago para procesar la transacción.
Esto podría ser la opción para: empresas pequeñas o locales que no están interesadas en la programación y quieren dejar cualquier tema de los pagos con un procesador de pagos externo.
Direct Post es un método de integración que permite a un cliente comprar sin salir de su sitio Web, ya que no tiene que obtener los estándares PCI (necesarios para la transacción). La conexión directa supone que los datos de la transacción se enviarán a la pasarela de pago después de que el cliente haga clic en el botón «comprar». Los datos llegan instantáneamente a la pasarela y al procesador sin ser almacenados en su propio servidor.
Las ventajas de este método son iguales a las de una pasarela de pago integrada. Usted obtiene las opciones de personalización y las capacidades de marca, sin el cumplimiento de estándares PCI DSS. El usuario realiza toda la acción necesaria en una sola página.
La desventaja es que el método de envío directo no es completamente seguro. Si quieres integrarla es necesario que establezcas una conexión API entre el carrito de la compra y la pasarela de pago para contabilizar los datos de la tarjeta. Esto no es un proceso complicado porque usualmente las plataformas de e-commerce ya cuentan con ello.
Una pasarela de pago integrada te permitirá mantener al usuario en tu sitio web durante la compra. Estas pasarelas son como la versión digital de una terminal punto de venta (TPV) en tu comercio electrónico.
La ventaja de implementar este tipo de pasarelas es que tendrás el control de todas las transacciones que se realicen en tu sitio. Además, puedes personalizar tu sistema de pago como desees y adaptarlo a las necesidades de tu negocio.
Sin embargo, lo complicado es que el mantenimiento de la infraestructura de este tipo de pasarelas es alto; además, deberás cumplir la normativa PCI, ya que tendrás que almacenar todos los datos de las tarjetas de crédito de los clientes en tus propios servidores. Además, la integración de la pasarela puede ser complicada si quiere añadir funciones personalizadas.
Para integrar este tipo de pasarelas necesitarás ayuda de ingenieros, porque incluso la documentación necesaria está pensada para ellos. Este tipo de pasarelas se recomiendan a empresas medianas y grandes que dependen en gran medida de la marca y la experiencia del usuario.
Ahora que conoces qué tipos de pasarelas hay, también deberás tener en cuenta todos los factores, las características de tu negocio y tus clientes. Como por ejemplo los precios, pues obvio debes pagar por su uso, pero no solo se trata de una contratación por mensualidades, sino que cada procesamiento cobra comisión.
Esto porque varias instituciones financieras participan en la verificación y autorización o el procesamiento de los pagos. Cada proveedor de soluciones de pago tiene sus propias condiciones de uso y tarifas. Por lo general, habrá una cuota de configuración de la pasarela, una cuota mensual de la pasarela, la configuración de la cuenta comercial y una cuota por cada transacción procesada.
Evalúa qué métodos de pago vas a aceptar, pues según la encuestadora Statista en marzo de 2017, los métodos de pago más populares son las tarjetas de crédito (42% de los compradores online), los pagos electrónicos como PayPal (39%) y las tarjetas de débito (28%). Pero eso no significa que tengas que admitir solo esos métodos.
Por ejemplo, poco a poco las criptomonedas están siendo una divisa que se utiliza para cobros, sin embargo, también los pagos móviles en e-wallets, así como el pago en efectivo para que se realicen en tiendas de conveniencia.
Otro aspecto es el soporte multidivisa. Si tu negocio es internacional o llega más allá de tu país, querrás que tus clientes puedan pagar, independientemente de la moneda que utilicen. Los proveedores de pasarelas más conocidos ofrecen soporte de procesamiento multidivisa con o sin una tarifa adicional.
No importa qué tipo de proveedor elijas, recuerda que los sitios web que utilizan un sistema de pago incorporado gozan de mayor confianza por parte de los clientes. Y si buscas una forma de mejorar la confianza de los clientes, integra una solución de pago que inspire confianza, que admita múltiples métodos de pago y que te proteja de acciones fraudulentas.
