Con el crecimiento de las redes sociales y su popularización, han cambiado no solo nuestros hábitos, sino también hasta nuestro lenguaje, incluso la forma en la que nos relacionamos con los demás. Por un lado hemos incorporado a nuestro vocabulario habitual palabras como estado, agregar, followear, trending topics, etiquetar… que antes no tenían ningún sentido y que ahora manejamos de una manera natural.