Un segundo de distracción o de apuro, quizás por hacer varias cosas a la vez en un lugar en el que todavía no estamos aclimatados, o por falta de conocimiento o información, pero también porque no estaban dadas todas las medidas de seguridad. A muchas personas les ha sucedido la desgracia de estropear sus dispositivos portátiles al enchufarlos a redes eléctricas de voltajes diferentes, y en un instante el daño puede ser irreparable.
Lamentablemente existen diferencias de sistemas eléctricos en los países del mundo, problema con el que deben lidiar las personas acostumbradas a viajar, ya sea por cuestiones de trabajo o de placer. Muchas veces no alcanzan las recomendaciones o las advertencias. Todo parece insuficiente.
Información preventiva
Es por esa razón que en la búsqueda de incrementar la toma de precaución, muchas empresas están incorporando como norma el marcaje de cables de alimentación para los dispositivos portátiles.
Estamos hablando de notebooks, netbooks, tablets, iPads, teléfonos inteligentes, filmadoras, cámaras fotográficas, grabadores digitales y una larga lista que podría completarse con los centenares de dispositivos electrónicos o gadgets que venimos acumulando en los últimos tiempos.
Suele tratarse en la mayoría de los casos de dispositivos muy sensibles a los saltos de tensión, y por la misma razón a las diferencias de voltaje. Enchufarlos a una red no tolerada por sus sistemas resultará sencillamente letal.
La gran mayoría de estos dispositivos se cargan directamente a la fuente de energía a mediante un transformador compacto que viene con el aparato. Si bien el transformador por lo general incluye una etiqueta de seguridad donde se detalla la información de entrada y salida de energía eléctrica (aparece como input y output), no está para nada de más que esa información también aparezca en los cables conductores.
El sistema de marcaje de cables consiste en impresoras especiales que pueden «pintar» inscripciones a lo largo de todo el recorrido del cable, permitiendo que ya de fábrica contenga también los datos necesarios para garantizar la seguridad.
Leyendas tales como «WARNING: PLUG ONLY INTO A 110V SOCKET», nos advierte que tal dispositivo se estropeará si se lo conecta a una red de 220V, por ejemplo. En esto no hay información que esté de más, y la redundancia puede resultar determinante para evitar el estropeo de un aparato electrónico.
Conocer para cuidar
Lo cierto y concreto en esta cuestión, es que como usuarios debemos tomarnos esos pocos minutos que son necesarios para informarnos del voltaje del país al que vamos, pero también para conocer mejor los dispositivos que utilizamos durante nuestros viajes.
En nuestra ayuda está el hecho de que en los últimos tiempos la gran mayoría de los gadgets cuentan con transformadores que toleran una entrada de energía de entre 100 y 240 V, y de entre 50 y 60Hz. Esto los vuelve inmunes a los cambios de voltaje. Pero también provoca que nos “relajemos” en nuestra necesidad de controlar e informarnos, y que demos por supuesto que todo se puede enchufar en cualquier lado. Las consecuencias ya la sabemos.
Entonces lo mejor será leer esta breve información, chequear los marcajes de cables, y con todos esos datos movernos y actuar con tranquilidad y total seguridad.