Es un poco difícil diferenciar lo que es un hacker con un pirata informático. Veámoslo de la siguiente manera: un hacker es un ángel de la informática, y un cracker es un demonio de la informática, pero en el sentido de las intenciones, es decir, uno es bueno y otro malo.
Lo cierto por aquí es que un hacker es un experto en seguridad informática, programación, sistemas de información, Internet, sistemas de seguridad, y un extenso etcétera, mientras que el cracker también es un experto en las áreas anteriormente mencionadas, y otras.
Ahora bien, la diferencia entre cada uno de éstos personajes es la intención con la que todo usan su conocimiento: mientras uno (el hacker, bueno) lo implementa para proteger y mejorar la seguridad de los sistemas informáticos, el otro (el cracker, malo) se sirve de dichos conocimientos para romper y dañar sistemas de informática. Bastante claro es.
Tres actitudes que tomaría un hacker serían: determinar en dónde están las fallas de los sistemas informáticos que son su competencia evaluar, analizarlos profundamente y de esa manera ofrecer soluciones para mejorarlo y así evitar posibles ataques en un futuro.
Por otra parte, tres de las actitudes más frecuentes de un cracker son: evaluar en dónde falla un sistema informático (es decir, encontrar vulnerabilidades o errores de software), ver de qué forma puede explotarlos, y luego van a romper dicho sistema sin compasión.